
Ascenso y consulado
Napoleón

Golpe de estado de Brumario
El golpe de Estado de Brumario, en el 9 de noviembre de 1799, fue el evento que marcó el fin del Directorio y el inicio del Consulado en Francia. Este golpe, liderado por Napoleón con el apoyo de políticos y militares, buscaba estabilizar el país tras años de caos revolucionario y corrupción en el gobierno.
Napoleón, junto con su hermano Luciano y otros aliados como Emmanuel Sieyès, utilizó el descontento social para justificar la disolución del Directorio. Lograron manipular a las cámaras legislativas para transferir el poder ejecutivo a tres cónsules provisionales, con Napoleón como figura predominante. Este movimiento consolidó a Napoleón como líder político.
Reforma del consulado
Durante el Consulado, Napoleón introdujo una serie de reformas que buscaban modernizar y centralizar Francia:
- Reorganización política: Redactó una nueva Constitución que estableció el Consulado, concentrando el poder en el Primer Cónsul, que era él mismo.
- Código Civil: En 1804, promulgó el Código Napoleónico, que uniformó las leyes en Francia, estableció derechos de propiedad y reforzó la autoridad estatal, pero limitó libertades políticas y sociales, como los derechos de las mujeres.
- Reformas económicas: Creó el Banco de Francia y estabilizó la economía mediante una moneda sólida y reformas fiscales.
- Educación: Estableció un sistema educativo controlado por el Estado para formar ciudadanos leales.
- Concordato con la Iglesia: Reconcilió a Francia con la Iglesia Católica, garantizando libertad de culto pero manteniendo al clero con el control estatal.
Estas reformas consolidaron el poder de Napoleón y modernizaron el país, sentando las bases para su posterior coronación como emperador.